Cuando algo te sucede una y otra vez es porque siempre
tienes que tomar en cuenta el error que has cometido, puede darte miedo
volverlo a intentar pero de algo si estoy segura, de que al menos eres feliz,
aunque solo al comienzo. Al terminar es normal sentir un vacío, es normal
sentirse mal por haber avanzado mucho en el error pero a veces hay errores que
nos definen mas que una virtud, a veces de los errores conoces a alguien que te
pueda cambiar tu mal humor, a veces de los errores te puedes conocer a ti mismo
pero aunque estés cansado de que te suceda una y otra vez un día más adelante
recordaras ese momento.
De vez en cuando queremos vivir como si no existiera mas
nada, y luego nos acostumbramos a depender siempre de apreciar algo, por mas
que duela en algún momento todo en tu alrededor va a cambiar, te va a fallar y
quedaras fuera de órbita, pensaras que no volverás a confiar en nadie, porque
eso si la confianza es el mejor regalo que no se le puede dar a cualquiera se
debe cuidar como a si mismo sin importar que. Aún así llegara ese día en que ya
nada lo valga y pienses lo peor de todo, ese día es donde te recordaras que,
vienes solo al mundo, te vas solo también, y... ¿Lo que sucedió a mitad de eso?
¿Pudiste haber llegado hasta al final solo? ¿No tuviste apoyo? Muchos somos
ciegos en ese aspecto, pero cuando nos traicionan mas bien nos están ayudando,
para que aprendamos a abrir los ojos, cuando hablan mal a nuestras espaldas,
nos ayudan a cuidar bien lo que le decimos a otras personas. Aquellas que así
sea nos escucharon una vez, en ese pequeño desahogo, gracias a esas personas no
explotamos, gracias a esas personas tuvimos menos minutos de silencio con uno
mismo. Y al final te das cuenta que nunca estuviste solo, siempre tienes a
alguien, no importa si no es el mismo de ayer o el de mañana, siempre tuviste a
alguien que vea así sea uno de tus pasos. Agradece, ayuda, fíjate en quien
confías y vive tu vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario